De Madrid al cielo gris
Llego justo a la firma de este martes porque suelo escribir el artículo con antelación y hoy no me ha dado tiempo. Que paren el mundo, que me bajo. La vida es aquello que pasa mientras estás haciendo planes, decía Lennon: los minutos vuelan y conviene exprimir cada momento, no como hace tanta gente desidiosa...Y ahora cambio de tercio. Recuerdo cuando trabajaba en Gran Vía y presumíamos del cielo de Madrid, de los amaneceres dignos de un lienzo de Antonio López y del ocaso que tan bien retrata mi amigo Félix Lorrio. Hoy leemos que la mugre nos engulle, que las autoridades municipales falsean los datos para que nos sintamos más limpios y que nos instan a utilizar el transporte público. A buenas horas, pero nunca es tarde para acabar con la verdad incómoda. Un poco de conciencia que, como apunta Forges, el ambiente siempre está en medio.
Ay, como en la canción de Siniestro Total, aquí el cielo también es gris, aunque no por la lluvia, sino por una contaminación que a veces se nos filtra en el alma. Necesitamos respirar aire puro en casi todos los ámbitos… Continuará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario